Resumen
La estrechez de asimilación de esta noción de cultura ha dificultado y a veces ha impedido que los propósitos declarados por las autoridades se reflejen consistente mente en las decisiones fundamentales que definen la orientación de las grandes líneas del desarrollo económico, social, y finalmente, cultural del país. A lo más que se ha llegado, en el mejor de los casos, ha sido a incluir un buen apartado, de escasa significación en el contexto general de los planes de acción gubernamentales, en los que se menciona la necesidad de atender el desarrollo mental de la población y tomar en cuenta su propia cultura.