El trabajo analiza el sistema público de comunicación en el nuevo gobierno de la llamada Cuarta Transformación histórica de México. Argumenta que, pese al establecimiento de importantes normatividades para regular dicha comunicación política y relevantes esfuerzos para elevar la calidad de esta, los medios públicos de difusión Estado no pudieron mantener su autonomía y sucumbieron ante las presiones gobiernistas para convertirse en aparatos de legitimación del sistema de poder lopezobradorista. De aquí, la urgente necesidad que la sociedad mexicana construya verdaderos medios de comunicación de Estado de servicio público neutrales que se comprometan a favor del avance democrático.