Abstract
A causa de las nuevas capacidades tecnológico-materiales que durante el siglo XX y principios del XXI conquistaron los medios de información colectivos, especialmente los electrónicos, y de las transformaciones urbano-políticas que se dieron, éstos se convirtieron en el centro del poder ideológico y político contemporáneo de nuestra nación. En este sentido, de haber sido instrumentos de difusión relevantes en 1960 en México, de transformarse en instituciones importantes de socialización en 1970 y de convertirse en el cuarto poder político a partir de 1980, como corresponsables del poder, a principios del siglo XXI se transformaron en el vértice del poder actual. Es decir, ya no sólo son simples instituciones importantes de información, o el cuarto poder, sino que ahora se han convertido en el “primer poder” ideológico que existe en nuestra sociedad.